Estamos de nuevo en otro año, 2016.
Un año que nunca creí que podía ver desde que en 2014 enfermé con un infarto cerebral, pero que gracias a Dios y a mis familiares he superado , y al día de hoy me encuentro muy mejorada, aunque con las secuelas que esta enfermedad deja, pero no me han impedido disfrutar estas pasadas navidades junto a mis hijos y demás familia..
Para este año recién estrenado, para mí solo he pedido que me quede como estoy , pero para mis hijos y nietos sí he sido más exigente pues son muchos, y para todos ellos quiero salud, felicidad y que puedan conseguir lo que cada uno necesita. Desde aquí pido a Dios paz y bienestar para el mundo entero que está muy necesitado de todo esto.